Hungría se liberó del yugo austríaco tras la Primera Guerra Mundial, pero su situación política y social estaba devastada y el panorama era desolador. Para colmo, las condiciones que se le impusieron fueron execrables: con el Tratado de Trianón perdieron muchos territorios en los que se encontraban minas de oro, plata, mercurio, sal… Su economía se vio golpeada duramente y su demografía bajó en tres millones de habitantes que se repartieron en esas tierras perdidas. Esta situación fue muy dura para el pueblo, que es quien, a la postre, paga todas las consecuencias.

Tras la Segunda Guerra Mundial, el Ejército Rojo ocupó Hungría. Otra guerra de esas características fue un duro contratiempo para una nación que no había terminado de lamerse las heridas, pero se prometieron cambios y los hubo. Con la llegada del Comunismo y su régimen, la nobleza fue, en el mejor de los casos, expulsada del país. Algunas familias tuvieron que refugiarse en territorios vecinos, otras huyeron a naciones más lejanas todavía. Sin embargo, el pueblo nunca llegó a recuperarse con las medidas políticas.

Después de la caída del comunismo, surgió la Tercera República Húngara, pero no fue longeva. En 1996, apenas siete años después de su proclamación, se consiguió la reinstauración de la Monarquía. El emperador honorífico Otto von Habsburg-Lothringen und Bourbon-Parma fue conminado amablemente a abdicar de la corona Húngara, a pesar de que su ostentoso renombre no es más que una anécdota del viejo y aniquilado imperio austrohúngaro.

La grandeza de Hungría volverá a brillar sobre Europa y este país será un ejemplo de cómo una institución declarada obsoleta puede devolverle su fulgor. El encargado de este cometido fue el señor Henrik Szpolyai, un pariente lejano, muy lejano, del que es considerado un más que digno sucesor. A través de él, se eligieron otras siete familias nobles con raíces húngaras muy potentes (y con, para qué negarlo, poder económico). Volvieron del extranjero para ocupar su puesto en la nación regenerada y dar lo mejor de sí mismos. El gran conflicto se produjo cuando Szpolyai, tras 19 años de buen hacer y devolver la fe en la monarquía, murió sin dejar descendencia ni un nombre de su confianza para que continuara con su loable labor.

Hubo intentos. Se propuso un candidato. Zoltán Tűzszív cumplía con las características requeridas: un noble de antigua cuna, maduro, con los pies en la tierra, elegante y deseoso de mostrar sus habilidades como monarca. Pero no pudo ser. En la fiesta que dio pavoneándose de su situación privilegiada acabó envenenado y alguien mandó un mensaje al resto de nobles, como si fuera algo personal. Sin embargo, a día de hoy la autoría del “casi” regicidio está en el anonimato y las fuerzas policiales trabajan duramente para hallar al culpable.

Pero no todo son malas noticias. En el día de hoy, 17 de agosto de 2016, Hungría tiene al segundo rey de su monarquía restaurada: Báthory Balász, el primogénito de dicha familia cuyo linaje puede remontarse siglos y siglos atrás, emparentado con la célebre Condesa Sangrienta, pero eso queda eclipsado por sus méritos personales: director de una próspera farmacéutica, filántropo y benefactor, mecenas de la cultura magyar, con una niña huérfana a su cargo y la absoluta certeza de que se sacrificará por su pueblo. Tras nombrar a su hermano Markov Báthory nádor, Hungría se prepara para una nueva etapa de prosperidad.

O quizás no. No todo el mundo está de acuerdo de la decisión respaldada por el Parlamento y algunos opinan que el reinado de los Báthory no será más que una desgracia para el pueblo húngaro.

La figura más destacable es la del REY. Este puesto, como es lógico, está reservado para usuarios comprometidos y activos en el foro. No puedes optar a él si tienes menos de cuatro meses o muy pocos mensajes en las zonas de rol. Tampoco puedes optar a él si antes no perteneces al grupo de NOBLES.

Funciones del REY:

La segunda figura que despunta es el NÁDOR. Este puesto también se atribuye a usuarios comprometidos, aunque es una elección del REY. Se trata del antiguo cargo de consejero, es decir, la persona de confianza que ayudará a que el REY no pierda el rumbo y vele por los intereses de los súbditos (o ciudadanos). Si el REY lo desea, puede darle representación real para que firme y gobierne por él. Es un puesto muy codiciado.

La tercera figura importante en el panorama político es el PARLAMENTO, que está compuesto por el CONSEJO REAL y PARTIDOS POLÍTICOS. El CONSEJO REAL está formado por todos los nobles de Hungría que han cumplido más de 21 años. Se pertenece a él por derecho de nacimiento, pero solo se puede tener una voz representativa si se participa activamente en el foro, por lo que hay 3 cupos para cubrir. Se encargan del poder legislativo y dan (o no) su apoyo al REY. Los PARTIDOS POLÍTICOS son agrupaciones ciudadanas, normalmente movidas por algún noble con intereses particulares, que pertenecen al sistema de gobierno para tener representación democrática o dar la ilusión de lo mismo. Es luchar contra titanes, por lo que hay que estar seguros de cada movimiento llevado a cabo. Actualmente está el partido NUEVA HUNGRÍA, de alineación monárquica, liderando el parlamento. Los PARTIDOS POLÍTICOS y sus respectivas cabezas también están limitados, en este caso con 5 cupos.

La cuarta figura que debemos rescatar es la de PRIMER MINISTRO. No es el presidente del país, ya que ese cargo lo ostenta el REY, sino la elección democrática del pueblo para que alguien “realmente” los incorpore en el gobierno húngaro. Esta persona puede ser de cualquier grupo.

¿CÓMO SE REPARTEN LOS VOTOS EN CASO DE SER NECESARIOS?

Cada personaje es un voto, salvo el de PRIMER MINISTRO, que, a falta de otro personaje dentro de su partido, puede tener dos.

Si los cupos no están cubiertos cuando haya que votar, se tirarán dados de PNJs con las consideraciones pertinentes: los miembros del CONSEJO REAL tendrán un valor más conservador para las decisiones, mientras que los miembros de los PARTIDOS POLÍTICOS serán 100% aleatorios. Los resultados se interpretarán narrativamente. El REY no puede invalidar las votaciones, pero puede coaccionar a las personas según sus intereses.

Hasta el 2016, siete familias húngaras estaban rivalizando entre ellas por el trono.

El Consejo Real, auspiciado por Román Hunyadi, determinó que Balász Báthory era la mejor elección para guiar a la nación en su reciente etapa monárquica y el mejor testigo del legado del difunto rey Henrik Szapolyai.

Seguimos teniendo siete familias principales:
»Báthory (aunque el rey sea un Báthory, el título de Conde ha pasado a su hermano)
»Takáscs de Sáar
»Sakozy
»Novak
»Orsós Munkácsi
» [Puesto libre]
» [Puesto libre]

A su vez, los títulos grandes de estas familias tienen como vasallas a otras casas nobles de Hungría. Estas componen la nobleza menor.
»Szarke y Herceg trabajan ahora, por una orden real, para Takáscs de Sáar
»Kertész trabaja para los Novak
»La señorita Weisz no se ha pronunciado respecto a su nobleza.

La nacionalidad húngara puede ser adquirida por cualquier persona que acredite OCHO o más años de residencia continuada en el país.

»Si has nacido en Hungría, puedes pedir tu ciudadanía después de CINCO años de residencia continuada.
»Si te casas con un ciudadano húngaro o una ciudadana húngara, puedes tramitarla después de TRES años de residencia continuada.

¿Qué es la residencia continuada?
La residencia continuada es vivir en Hungría de forma legal. Cualquier extranjero puede visitar el país, pero su permiso para estar en el mismo solo se extiende por tres meses. Hay excepciones para los estudiantes y los trabajadores con contrato.

En el caso de los menores, es responsabilidad de sus padres conseguir los permisos correspondientes y presentar los papeles a tiempo.

¿Cómo se consigue o se mantiene la residencia continuada?
Los personajes que tengan un trabajo con contrato o los estudiantes universitarios deben renovar su permiso una vez cada tres meses off rol. Para ello, deben pasar por la TIENDA y adquirir un pase de renovación por 50 forintos. De lo contrario, podrían tener problemas legales.

Los personajes que no tengan un trabajo con contrato y sean extranjeros, deben renovar su permiso cada mes pasando por la TIENDA y adquiriendo un pase de 25 forintos de validez mensual. Entre estos personajes entran aquellos con profesiones como freelancers, artistas, detectives privados y demás.

¿Se puede mantener doble nacionalidad?
Sí, por supuesto. Hungría no te obliga a renunciar a tu otra nacionalidad. Solo se pierde por renuncia o por mandato real.

¿Qué pasa si no tengo el pase de residencia legal?
Serás un residente ilegal y la policía tendrá orden de localizarte. Lo que pase a continuación se deja a discreción del rol.